IDEAS QUE ARDEN

Hace poco hice un cuadro, uno con una historia detrás, y aunque dudaba si publicarlo o no, he decidido hacerlo porque aunque con él expreso mi opinión personal, no obligo a nadie a cambiar la suya ni a intentar entenderlo. Además qué es el arte, sino una opinión personal, una manera de reflejar con líneas y colores, lo que con palabras no se puede decir.

Por eso decidí pintar este cuadro, porque estoy harta de poner el telediario y ver siempre las mismas noticias, peleas, incendios, violencia en todos lados. ¿No hemos aprendido ya que la violencia nunca es la solución? ¿Hace falta ver arder Cataluña para comprobarlo?

Quizá mi visión no sea la más objetiva, pero lo que está claro es que no soy la única que lo piensa, que no encuentra argumentos suficientes que justifiquen tanto daño y tanto odio. Porque independientemente de las opiniones, sean éstas a favor o en contra de la causa, hay algo que está por encima de todo, y es el RESPETO, respeto a los ciudadanos, a los trabajadores, a la tierra, a esa que se está quemando cada día sin que haya agua que la apague.

España no es solo su tierra, ni sus políticos, España es su gente, somos todos nosotros los que formamos este país, y es nuestro deber como ciudadanos, pero sobre todo como personas, hacer de él un lugar del que estar orgulloso. No hablo de política, todavía me quedan unos cuantos años para entrar en ese mundo, hablo de humanidad, derechos, respeto, igualdad...

Sé que todo es mejorable, y que ni en el mejor de los mundos todos podríamos ponernos de acuerdo, pero hay maneras y maneras de solucionar las cosas, y sinceramente, no creo que ésta sea la más acertada.

Ojalá recordemos que significa el respeto hacia los demás, y que cuando lo hagamos no sea demasiado tarde, ojalá podamos encender el televisor y ver que Cataluña ya no arde.